Arsenal Vs Barcelona Resultado 16 de Febrero 2011

Arsenal Vs Barcelona Resultado 16 de Febrero 2011
Fueron cinco minutos de espesura, tan pronunciada que al Barcelona se le complica la vida en Europa por no saber cerrar lo que parecía finiquitado. A la espera de que se anuncie a bombo y platillo otra noche mágica en el Camp Nou, marcado ya el 8 de marzo como el día clave para que se ilusione el entorno azulgrana, el Barça busca todavía respuestas al revolcón que se llevó del Emirates Stadium, timorato el graderío durante más de una hora hasta que el Arsenal apostó por ser él mismo, corajudo en esos cinco minutos tan intensos. Estaba todo aparentemente controlado, feliz como una perdiz la expedición catalana porque con un 0-1 casi que sobraba la vuelta, pero el Arsenal, aunque se venda que de británico tiene poco, exprimió el manual inglés y se creyó más gigante que nunca, mortal en la contra para minimizar el poder español. Incapaz de ganar una eliminatoria a domicilio en la Champions desde que manda Guardiola, al Barcelona se le presenta la peor de las situaciones después de resucitar a un oponente que apenas respiraba.
Y eso que la batalla del balón, pregonada a los cuatro vientos en la previa ya que al Arsenal se le presupone que es lo más parecido al Barça, quedó resuelta desde el principio, mucho más recatado el conjunto inglés que de costumbre, replegado y menos vertical porque el poderío del enemigo obligaba a andar con cierta cautela. No es el Barcelona el mejor invitado como para presumir de valentía y cuando quiso plantar cara pronto se dio cuenta de que el Barcelona, si está bien, es tan superior que ni siquiera bastan las buenas intenciones. Nadie le puede negar a Wenger que su pizarra es atractiva, poco común en un fútbol en donde la pelota casi es lo de menos, pero se cruzó con el dueño universal del balón. Lo tocó bien el conjunto azulgrana, controlado el encuentro en buena medida salvo cuando los ingleses volaban en las salidas, decisivo Valdés a los cinco minutos cuando Van Persie pudo alterar por completo un guión que luego les reencontraría. Con ese susto se despertó el Barça y empezó a cocinar lo que vendría luego, una apetecible ración con un aroma inconfundible en donde se intuye el picante con los tres delanteros, siempre móviles, intercambiando posiciones para desesperación de una defensa, la británica, tan arriesgada que daba miedo.

Messi asiste, Villa marca

Hasta el gol de Villa, se sucedieron los ataques, muchísimo más inquietantes los foráneos. La tuvo clarísima Messi, tanto que en su duelo contra el portero, fintar aquí y finta allá, se engañó a sí mismo y cruzó en exceso el balón, acomplejado por una anglofobia que le prohibe marcar en Inglaterra. Luego, antes de la aparición divina del asturiano para estrenar el marcador, fue decisivo Abidal cuando Van Persie husmeaba su momento de gloria. Te ataco yo, me atacas tú, pero en ese juego es difícil que le vaya mal al Barça. Villa, asistencia otra vez de Messi, marcó el camino y Pedro pudo acabar definitivamente con el debate en una acción finalizada con dudoso gol anulado a Messi, tan cuestionada como un derribo al canario en la reanudación que hubiese significado penalti y expulsión.
Ahí, después del intermedio, el Arsenal recuperó algo del Arsenal, más consolidado en un centro del campo que presentó a Whilshere como un jugador para seguir de cerca, y su mérito, resultado al margen, fue silenciar al Barcelona y desdibujarle sin grandes alardes. El Barça, sustituido Villa porque Guardiola prefirió contemporizar con Keita, aguantó la compostura de buena manera hasta que llegó el fogonazo de Van Persie, una media ocasión que acabó siendo un golazo con colaboración de Valdés, descuidado su primer palo porque nadie se esperaba semejante remate. Ese tanto regeneró a los ingleses y Arshavin enmudeció al Barcelona, enfadado con el mes de febrero. Peligra Europa.
Fuente: abc.es