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La ATP ha recomendado a los jugadores que tomen precauciones de seguridad durante el Abierto Mexicano en Acapulco e indicó que ha recibido garantías de los organizadores mexicanos en ese sentido.
Con cuadros de la ATP y la WTA, el Abierto Mexicano, el principal torneo de tenis en Latinoamérica, se pone en marcha el lunes.
La ciudad mexicana, en la costa del Pacífico, ha sido blanco reciente de la violencia por el narcotráfico.
El domingo, la policía del estado de Guerrero anunció que una ola de ataques contra taxis había dejado 12 muertos, entre conductores y pasajeros, desde el viernes. En la sangrienta guerra entre cárteles del narcotráfico en la zona, los taxistas han sido blancos de extorsiones y también reclutas obligados de los traficantes para transportar drogas o servir de informantes.
Cuatro sospechosos habían sido detenidos por algunos de los ataques, con armas de fuego, una granada y un machete en su poder.
En enero, los cadáveres decapitados de 14 hombres fueron encontrados frente a un centro comercial. Otro cuerpo, con la cabeza intacta, fue encontrado cerca del lugar.
La ATP, en un comunicado destacó que ha recibido garantías por parte de todas las esferas gubernamentales en México.
''Después de un análisis independiente sobre la seguridad y conversaciones con los organizadores del torneo, estamos satisfechos de que se han tomado medidas responsables y que el evento cuenta con el respaldo total de las autoridades de Acapulco, el estado de Guerrero y el gobierno federal de México'', indicó el comunicado.
Los jugadores han recibido correos electrónicos de la ATP sobre la situación, advirtiéndoles sobre el riesgo de salir y les sugieren permanecer cerca de su hotel. Se sugirió, además, llegar a Acapulco lo más tarde posible e irse de inmediato apenas son eliminados.
El argentino David Nalbandian mencionó el sábado que contempla no ir al torneo. Si bien declaró que padece una molestia en la zona del pubis, Nalbandian también se refirió a la inseguridad en Acapulco.
Acapulco es un torneo ''grande y lindo para jugar, pero por ahí ahora está un poco más complicado por el tema de la seguridad, estamos todos medio asustados con eso y viendo qué hacer'', dijo Nalbandian.
El español David Ferrer, ganador de la pasada edición, llegó a Acapulco hace varios días y se mostró despreocupado por la situación.
''Yo llegué el jueves a Acapulco y no tuve ningún tipo de temor en regresar aquí'', señaló Ferrer.
Fuente: vanguardia.com.mx